América Latina se mira en el espejo de una Sri Lanka en ruinas y en caos

América Latina se mira en el espejo de una Sri Lanka en ruinas y en caos Sputnik Mundo Se espera que la renuncia del presidente Gotabaya Rajapaksa calme la brutal crisis política que dejó al país sin cabeza. América Latina mira con preocupación lo que pasa en Sri Lanka, el ejemplo perfecto y más extremo de la crisis mundial provocada por la pandemia, la inflación y los aumentos en los precios de los combustibles derivados de las sanciones a Rusia por el conflicto en Ucrania. El 20 de julio el Parlamento deberá elegir al sucesor de Gotabaya Rajapaksa. El sábado 9 el mandatario abandonó su residencia en Colombo, minutos antes de que una multitud de manifestantes ingresara al lugar y pidiera su dimisión. La inflación descontrolada, los cortes de luz de más de 13 horas, los toques de queda, la caída del turismo y la crisis alimentaria fueron algunos de los factores que incentivaron la protesta social. "En la población hay furia, pero son conscientes del período de guerra civil que vivieron y el retroceso económico que esto ocasionó. Sri Lanka quiere una salida democrática, quiere conservar la institucionalización del país", dijo a Telescopiola analista argentina Clara Sánchez, Magíster en Relaciones y Negociaciones Internacionales e Investigadora en el Consejo Argentino para las Relaciones Internacionales (CARI). El descontento venía gestándose desde hace varios meses. Sri Lanka se convirtió en el primer país pospandemia en caer en default: el 12 de abril suspendió el pago de su deuda externa que asciende a más de 50.000 millones de dólares. La mayoría de los 22 millones de habitantes vive sin acceso a los alimentos, medicamentos, combustible, electricidad y gas. "El presidente que llegue va a tener cero margen de maniobra en las decisiones económicas del país. Creo que el FMI o China terminarán de decidir y van a bajar a un sistema económico más o menos cerrado, y un plan de medidas a tomar por parte de las autoridades que asuman el poder", aseguró la analista e investigadora. Para América Latina, el antecedente de cómo se resuelva la crisis, de lo que haga el FMI, y de la colaboración de China y Rusia con el país asiático, es clave. A criterio de la entrevistada, el próximo Ejecutivo esrilanqués será "de tecnócratas, dirigido por los acreedores". En abril de 2021, Rajapaksadecidió prohibir las importaciones de fertilizantes químicos en un intento para impulsar la agricultura orgánica. Sin embargo, la medida afectó a las cosechas de arroz, de primera necesidad, e impulsó un aumento de los precios junto a otros alimentos. "Asia del Sur está muy complicada con temas económicos, étnicos y religiosos. Nadie necesita más conflictos de los que hay en el mundo, y estas chispas que parecen pequeñas después traen consecuencias más grandes en el ámbito internacional y global", resaltó la analista. En condiciones habituales, el presidente de Sri Lanka se elige por cinco años mediante comicios generales. Pero para el traspaso del puesto de mando en una situación especial —incluida la dimisión del presidente antes de expirar su mandato— la Constitución prevé otro mecanismo: el nuevo mandatario se elige para el período que queda del mandato mediante la votación de los parlamentarios.